22 julio, 2012

La amada inmóvil

TODO en ella encantaba, todo en ella atraía: su mirada, su gesto, su sonrisa, su andar...El ingenio de Francia de su boca fluía. Era llena de gracia, como el Avemaría; ¡quien la vio no la pudo ya jamás olvidar!.. ¡Cuánto, cuánto la quise! ¡Por diéz años fue mía; pero flores tan bellas nunca pueden durar! ¡Era llena de gracia, como el Avemaría; y a la Fuente de gracia, de donde procedía, se volvió... como gota que se vuelve a la mar!
Amado Nervo

1 comentario:

Déjame palabras que sea la sonrisa de cada día.